La insólita medida de los ultras del Inter y del Milan en Italia: los motivos detrás del inédito reclamo conjunto

0
4

El comienzo de la temporada en la Serie A de Italia estuvo marcado por una inesperada y llamativa protesta sin precedentes. Es que los ultras del Milan y del Inter han optado por el silencio absoluto en las tribunas y, en algunos casos, por la ausencia total en los partidos, como respuesta directa a las recientes restricciones impuestas por las dirigencias de ambos clubes.

La raíz de este conflicto se encuentra en la decisión de las autoridades de los clubes de la Ciudad de la Moda de limitar el acceso de determinados aficionados y prohibir el ingreso de banderas y pancartas, una medida que surgió después de la revelación de constantes irregularidades y delitos atribuidos a los sectores más radicalizados de las gradas. Es decir: los ultras.

Esta política ha generado una reacción inmediata entre los barrabravas, quienes consideran que las sanciones afectan de manera indiscriminada a la masa de todos los seguidores.

Durante el partido inaugural frente a Cremonese, la Curva Sud, agrupación del Rossonero, mantuvo un silencio ininterrumpido durante los 90 minutos. En un comunicado difundido en sus redes sociales, la agrupación expresó su descontento: “Casi todas las pancartas antiguas están prohibidas. Existe una lista negra con prohibición de abono en el segundo anfiteatro. Por orden público, nos prohíben abonarnos en esa zona, pero si conseguimos una de las pocas entradas disponibles para cada partido en el mismo sector, de repente el problema de orden público desaparece ¡Una locura!”.

Por su parte, la Curva Nord, que representa a los fanáticos del Nerazzurro, decidió intensificar la protesta y no se presentó en el estadio de San Siro durante el encuentro ante Torino. A través de sus canales oficiales, el grupo denunció: “Además del constante aumento de precios sin sentido, nos encontramos con las famosas listas negras. Decenas de jóvenes de los grupos no pudieron renovar sus abonos sin ningún motivo válido. La mayoría ni siquiera tiene antecedentes ni problemas legales”.

La postura de la Curva Nord se mantuvo firme al exigir condiciones que consideran básicas para cualquier aficionado. “Hasta que San Siro deje de ser un lugar blindado y vuelva a ser un estadio pensado para la gente; hasta que las entradas sean accesibles para cualquiera que quiera ir a ver al Inter. No pedimos privilegios, pedimos lo que en cualquier estadio de Italia y Europa es lo normal”, completó el documento.

Cabe recordar que hace un par de meses, las autoridades italianas detuvieron a 7 ultras del Inter y el Milan acusados de usura, extorsión y falsificación de facturas con el agravante de relación con la mafia, en el marco de la investigación a sendas facciones radicales desde septiembre de 2024.

Cinco encarcelados y otros dos arrestos domiciliares volvieron a colocar a los clubes del norte de Italia en el foco por sus fanáticos más radicales después de que hace siete meses se llevase a cabo la operación policial en la que se detuvieron a 19 hinchas de ambos equipos.

Esos primeros 19 fueron arrestados por delitos de conspiración criminal con el agravante del método mafioso, además de extorsión, lesiones y otros delitos graves cometidos en las inmediaciones del Giuseppe Meazza. Además, en el informe se estableció que los barras “controlaban todo”; desde los estacionamientos hasta los negocios de venta de merchandising.

En el último operativo, los 7 arrestados gestionaban de manera ilegal los lugares para estacionar cerca del estadio los días de partido y exigían unos intereses de entre un 400% y hasta un 800% sobre algunos préstamos que facilitaban de manera ilegal a empresarios de la zona norte de Italia cercana a Milán, a los que luego amenazaban para recibir el pago.

Dejar respuesta

Please enter your comment!
Please enter your name here